Capítulo 5, Feliz navidad parte 1

POV: Bella

Estaba tumbada en la cama, leyendo un libro -siempre leía algún libro cuando me aburría- de los que leía en casa de Charlie. Mientras leía escuchaba la conversación entre mi familia. Sobre todo, las de Renesmee y Jacob, aunque sin prestarle mucha atención. También escuchaba el sonido del mar.
-Feliz navidad, Ness- dijo Jacob, desde abajo.
¿Feliz navidad? No podía ser navidad, aun no había pasado tanto tiempo desde mi cumpleaños -que tuve que celebrar por culpa de Alice-.
Me levanté y me dirigí al calendario que estaba colgado en la habitación. Miré el día en el que estábamos y el mes. Diciembre, 24. Genial, en navidades y lejos de Forks. Bajé las escaleras de un salto.
-Carlisle, tendríamos que volver a Forks, hoy es navidad- dije.
-No podemos, Bella- dijo él.
Salió de casa y fui al lado de Edward. Le miré y luego a mi hija, que estaba agarrada a la mano de Jacob. Lo que me faltaba, no tenía suficiente con lo de las navidades como que ahora mi hija se estuviera enamorando de mi mejor amigo. Me acerqué a ellos y me puse en medio, sonriendo.
-Edward, tendríamos que volver a Forks- dije mirando a mi hija.
-Es verdad, pero Carlisle dice que no podemos- respondió mirándome.
-Pues no sé vosotros, pero yo voy a ir- dije y miré a Jacob.- Con mi hija
Jacob me miró con cara de pocos amigos. Me giré a la puerta y vi entrar a Rose junto a Emmett. Rose miró mal a Jacob -no me parecía extraño- pero esta vez, con cara de más odio que de asco.
-Bella, ayer el chucho besó a tu hija- dijo Rose.
-¿Perdón?- dije mirando a Rose.
Renesmee se fue de mi lado, pero Edward la paró cogiéndola de los hombros. Miré a mi hija y luego a Jacob. Genial, ahora ¿qué van a hacer? como salgan juntos, me cargaba a Jacob, eso estaba claro. Me giré a mi marido y le miré.
"¿Ahora que hacemos?" pensé quitándome antes el escudo.
Edward se acercó a mí cogiendo a mi hija de la mano, para que no fuera con Jacob. Me miró fijamente.
-No preocuparnos- me susurró al oído.
¿No preocuparnos? Pero como no me iba a preocupar.
-¿No preocuparnos? Pero ¿cómo no me voy a preocupar?- dije sacando mis pensamientos.
Él se encogió de hombros y me besó. Le seguí el beso durante unos segundos y me aleje.
-De momento, yo me voy a Forks con mi hija- dije mirando mal a Jacob.
Todos me miraron, como si hubiera dicho algo malo, pero mi hija me miraba con cara de pena. Esta vez no diría que se podía quedar o que podía venir Jacob. No.